Araujo Liliana

El prominente reino de las cuicas

(Ramón Urdaneta Blog/28 de abril del 2012)

     De modo que este escrito tiene como propósito abordar los diversos vestigios de la cultura cuica de la importancia de esas huellas del pasado que les da la sucesión al presente, por lo tanto, cabe destacar que son variadas las hipótesis y teorías que dan explicaciones del origen de los primeros pobladores de nuestro continente al igual que del territorio venezolano. Por consiguiente es de gran importancia conocer las diferentes manifestaciones culturales de todas las tribus indígenas que poblaron en aquel tiempo buena parte del territorio venezolano en especial del estado Trujillo.

     Tomando en cuenta los artículos de Ramón Urdaneta publicado en su blog en 28 de abril del 2012 divididos en cuatro fases y titulado el prominente reino de los cuicas, en el cual da a conocer un poco de la vida y tiempo de los cuicas, el cómo fue su penetración y asentamiento en el territorio que hoy conocemos como estado Trujillo, provenientes como desprendimientos avanzados de la fronteriza gran nación muisca de lo que hoy es Colombia que en su diversa mezcla con otras tribus fueron aposentando en lo que es hoy los andes venezolanos y de allí surgió un crecimiento estructural tanto en lo social, cultural y economía entre todos los pueblos indígenas.

     Asimismo se da conocer el avance de esta tribu indígena en la parte de la agricultura que estaba referida al sostenimiento familiar y comercio mediante trueques o permutas comunitaria, en cuanto al vestido y las artes manuales eran de forma de guayuco para las partes intimas dependiendo también de las condiciones climáticas del espacio geográfico en el que se encontraban, usaban vestidos de algodón, túnicas y mantas, al igual el uso de accesorios confeccionados de semillas, huesos y piedras por sus propias manos, realizaban tejidos de diferentes prendas, trabajaban el pulimiento de piedras, cuarzo, conchas, azabache, la pizarra y el sílex en punta de flecha para uso como herramienta de trabajo  y defensa, además eran fabricantes de objetos de barro cocido, conocían y hacían uso de plantas y animales que servían como medicina naturista remedios que hoy día aun conocemos o hemos escuchado nombrar por nuestras padres o abuelos.

      Por otro lado también es necesario conocer que los cuicas fueron comunidades mansas pero con un sistema de organización de protección y jerarquización trivial para defender el bien comunitario de la tribu. Los cuicas se autoabastecían de las necesidades primarias, sin embargo, tuvieron relaciones de trueque con los caribes y quizás con otras tribus cercanas, estos conocían además de transacciones comerciales sabían contar en pequeñas cantidades (docenas), rendían culto a un Dios ser supremo espíritu creador sintiendo gran respeto por la naturaleza y de modo especial adoraban al sol y la luna.

Urdaneta describe en su artículo “los cuicas fueron de carácter callado, introvertido, y melancólicos, de mediana estatura tenían la cabeza redonda, la piel morena, en las mujeres el busto y caderas desarrollados, los ojo oblicuos y negros con los cabellos lacios y largos. Prácticamente no existían calvos, pero si muchos barbilampiños”.

     Todos los aspectos antes mencionados y otros quizás olvidados son de gran importancia conocerlos a profundidad, indagar de diferentes fuentes confiables para así conocer acerca de nuestro origen la herencia dejada por el reino de los cuicas fusionada con la herencia europea y africana que comenzó la invasión española en nuestro territorio. Por último se resalta que el estudio de esta tribu como de cualquier otra perteneciente a los primeros pobladores de nuestro territorio en ocasiones es obviado e incluso no tomado en cuenta, es por ello que se hace necesario profundizar el estudio e investigaciones para reconstruir la vida y tiempo de los grupos indígenas que poblaron la Venezuela primitiva.

EL PROMINENTE REINO DE LOS CUICAS

De Ramón Urdaneta

(Minuta)

                                            Aurelis M. Briceño A.

         El territorio venezolano recibió diversas oleadas de los primeros habitantes del continente americano. Entre la variedad de tribus establecidas en el país hablare sobre los “Cuicas”, tribu cultural que representa mis raíces trujillanas y que marcan el devenir histórico de un estado andino y que a lo mejor como tales desconocemos.

Ahora bien, dentro de la formación de la sociedad y costumbres, se establecen en el estado Trujillo los Cuicas que, dentro de un territorio poco poblado (500.000 personas) como era Venezuela, el número de habitantes cuicas podía ser de 20.000 naturales; una tribu procedente de una mezcla de la gran nación Musca y la etnia Chibcha, donde al igual que en otras tribus para el momento de la penetración Española, afrontaron diversas dificultades como enfermedades, trabajo forzoso etc.

         Nuestras raíces Cuicas nos permite definirnos como trujillanos, pueblo donde prevalece la cultura heredada de esos antepasados que forma parte de nuestra historia, entre ellas ese procedente agrícola que en su época era la forma de poder subsistir produciendo grandes cosechas como el maíz, jojoto, papas, tomate, yuca entre otros. A su vez las artes manuales como la cestería, bolsos, cotizas, alpargatas, chinchorros, etc; y se puede decir que ¡quién no ha visitado Trujillo si deleitar un mojito sin un buen ají! También creado por estos nativos; o bien que nos hallamos mejorado con alguna medicina naturista hecha con yerbas, frutos, hojas, flores, raíces etc.

Por lo expuesto anteriormente, es importante evidenciar que actividades que vivimos y comparamos a diario no nos permita preguntarnos de donde provine bien sea un alimento, una fiesta religiosa o simplemente como se conformó mi estado antes que yo naciera. La población lamentablemente no conoce nuestras raíces y por ende existe un vacío sobre este tema.

Entonces la pregunta sería ¿Qué hacer para que esto cambie o mejore?

Es importante primero desarrollar en la población interés e incentivo sobre la importancia de estos temas, pero aunque se quisiera hacer mucho se puede dificultar. Yo ofrezco una propuesta que por lo menos despierte la curiosidad en las personas, como vídeos, cines en las plazas o comunidades una vez por semana o mensuales sobre documentales acerca de la historia trujillana, a su vez repartir fichas o volantes que proporcionen nuestra historia regional.

Finalmente un aporte es muy importante y más si es para el desarrollo cultural, que permita la identificación con el otro y con el entorno, dando paso a que la historia siga el curso de estudiar el pasado para comprender nuestro presente.